No me gustan los Pitufos.
Los cogí manía cuando Papá Pitufo, con un par de conjuros (o tirando de cirugía plástica), vuelve mona y deseable a la solitaria Pitufina para sembrar la discordia en la comunidad.
Es un plan enrevesado y maquiavélico, pero lo dejo ahí y regreso a la gruñidera del día.
Me molestan cosas; ser la reponedora del rollo wc, perder uno de los airpods o que me pisen lo fregao.
Hay otro concepto irritante que me confunde como la existencia de la deep web y es la manoseada «sinergia«.
No exageres Marta.
Vale.
Sinergia: Uno más uno es tres
Estas dos frases son habituales:
- ¿Nos hacemos un zoom y buscamos la sinergia?
- Te contacto porque veo que tenemos sinergias en común
No entiendo que seamos tan redichos y desde luego, es algo que no viene de serie con la Wifi.
Definamos sinergia: Interacción cooperativa de elementos separados para producir un resultado combinado que es más efectivo o más grande que la suma de las partes individuales.
En otras palabras, es cuando la colaboración entre dos o más elementos produce un efecto más poderoso que el de cada uno de ellos trabajando de forma aislada.
En mi mundo eso es el trueque o la colaboración de toda la vida.
A ver. Consiste en que yo me encargo de esta movida y tú de la otra.
FIN.
Negocios B2B, B2C y B2loquesea ya se están juntando para sobrevivir. (Véase el caso de Intimissimi vendiendo en las tiendas de Mango) y a eso lo llaman sinergias.
La correcta colaboración es una ley natural que dice que 1+1 = 3