Charlas sin postureos: cómo ser una conferenciante molona sin ser cansina
¿Qué está pasando con el mundo de los conferenciantes?
Veo conferencias por todos lados. Me llegan mil invitaciones.
Se reúnen en teatros, cafés, salas multiusos, naves industriales…
¿Estoy bajo los efectos del sesgo de confirmación?
El sesgo de confirmación
Hay un fenómeno que se conoce como «sesgo de confirmación» o «efecto de frecuencia ilusoria».
Este sesgo ocurre cuando una persona presta más atención a eventos o situaciones que confirman sus propias experiencias, creencias o valores.
A ver, si estás embarazada, seguro que ves más mujeres embarazadas a tu alrededor, no porque haya más, sino porque tu atención está enfocada en la preñez debido a su condición.
Con los lambos rojos pasa igual.
Y con los cruasanes de mantequilla.
A las 9 de la mañana los ves en todos los escaparates.
En ocasiones veo conferenciantes
Vuelvo a las charletas.
¿Qué pasa con el poder de la palabra? ¿Nos ha dado a todas por descubrir que es importante?
Mira.
No es nada fácil subir a un estrado a soltar la chapa sin que se nos duerma el personal.
Porque todo el mundo odia a ese conferenciante que habla y habla mientras la gente piensa en la próxima reunión. ¿Eres uno de ellos?
En el METAdamas de esta semana, mi admirada Raquel Sánchez Armán profundiza en la oratoria y nos da recomendaciones superinteresantes.
¿Cómo se cocina una buena charla? ¿Cuántos minutos tarda el cerebro en desconectar? ¿Por qué tienen tanto tirón; Víctor Küppers, Mario Alonso Puig, David Meca o Marian Rojas? ¿Hacen falta tantas charlas TED?
Abajo te pongo el enlace al pódcast y te lo pillas en Spotify, Apple Podcasts, Ivoox y resto de plataformas.
METAdamas es omnicanal. Está en todas partes (como mi futuro libro)
¿Qué dices? ¿Me preguntas por mi libro?
Bien.
Te respondo con tres golpes de pala:
- Ya está metido en las máquinas de imprenta. Empieza a oler a tinta y a papel del bueno.
- Ya tenemos la portada, pero falta una palabrita y por eso no te la puedo enseñar.
- Mis editores dicen que es la hostia. La portada y el contenido.
- Yo digo que es un libro de NICHO. De mucho NICHO
¿Qué diría Chaplin de mi libro, si levantara la cabeza?
Chaplin era un crack, pero incluso él no podía hacer reír a la gente con el mismo chiste más de una vez.
Cuentan que repitió la gracia un par de veces y el público se inquietó.
A nadie le gustó la cosa.
Se querían largar.
Entonces Chaplin miró a la platea y dijo: «Si no puedes reírte de un mismo chiste una y otra vez, ¿por qué lloras una y otra vez por un mismo problema?»
Toma nota my darling.
Murió con 88 años y robaron su cadáver 4 meses después.
¿Lo sabías?
Los «secuestrahuesos» le pidieron 600.000 dólares a Geraldine Chaplin. Con toda su jeta.
Después de unas semanas pillaron a los «chorizos» en la cabina de teléfono donde iban a hacer la transacción.
Pardillos…
A Charlot lo encontraron a un metro bajo tierra en un campo de maíz, a un kilómetro y medio de la mansión de la familia, y lo volvieron a enterrar en el cementerio de Corsier-sur-Vevey el 23 de mayo de 1978.
Eso sí, bajo una gruesa losa de mármol.
Historias parecidas como esta (mejores) las hay en mi libro.
Tendrás que esperar a junio.
Te mandaré día, hora y ubicación de mi flamante caseta en la Feria del Libro de los madriles.
La honestidad: ese rollo que conecta
Hablar claro y sin rodeos es como encontrar un billete en la calle, no pasa siempre, pero cuando pasa, lo flipas tanto que piensas que es falso.
Así son las cosas.
Si hay honestidad, la gente te compra, y no hablo de vender la thermomix, sino de vender tu rollo, pero de buena fe.
Aunque no te pases, que la línea entre la pedantería y la sinceridad es más fina que el papel de fumar.
Truquillos para no ser un tostón
Aquí van unos consejillos para que tu charla sea más fresca que el agua de los Pirineos:
- Claridad: habla como si lo hicieras con tu colega.
- Concisión: al grano, que el tiempo es oro.
- Pasión: si te encanta lo que cuentas, se nota.
- Interacción: que no sea un monólogo, invita a la charla.
- Historias: amamos un buen salseo, úsalo a tu favor.
Ser conferenciante crac es jugar con las palabras y transformarlas en ideas que pueden cambiar el mundo.
Deja que tu respiración fluya serena.
Como dice Raquel, la gente va a su bola. Solo una parte pequeña va a prestarte atención.
¡Y que no se te olvide!
Siempre puedes s0ltar un chistaco para romper el hielo, pero por favor… no te repitas.
P.D: Mis 4 recomendaciones:
📖 Un libro ↣ Cancelación. Manual contra la dictadura de la ideología, el pensamiento binario y el odio político de Alessia Putin (pronto en METAdamas)
🍿 Una serie ↣ Vestidas de azul
🍽️ Una comida ↣ Bolas de queso Idiazabal rebozadas y fritas en aceite de oliva
🎙️ Un pódcast ↣ METAdamas con Raquel Sánchez Armán, la aventura de ser conferenciante y triunfar en el escenario
